Salvador Ibáñez

Unos días después de la celebración de la primera de las bajas disputadas en suelo árabe, se ponía en marcha la segunda, en la que los grandes protagonistas volvieron a ser Carlos Sainz y Nasser Al-Attiyah.

Sainz/Cruz marcaban el ritmo en la primera de las dos etapas, imponiéndose sobre Al-Attiyah/Baumel, que terminaban la especial a 2’12” de los ganadores, por delante de Peterhansel/Bolulanger, de Al-Rajhi/Von Zitzewitz y de Vasilyev/Tsyro, que completaban el quinteto de cabeza.  

Sorpresas finales                                     

La pareja española mantuvo la ventaja sobre el Toyota durante toda la segunda etapa del rallye, hasta que a unos 20 km del final tenían problemas para localizar uno de los puntos de paso del recorrido y perdían unos valiosos minutos que daban la victoria en la etapa y en la carrera a Al-Attiyah y a Baumel. Los de Toyota, de paso, se adjudicaban la Copa del Mundo de Bajas.

Pero no terminaban aquí las sorpresas en la carrera, ya que Tanto Al-Attiyah/Baumel, como Sainz/Cruz eran penalizados por exceso de velocidad en un tramo limitado, el Toyota con dos minutos y el Mini con uno, lo que devolvía la victoria en la carrera a Sainz/Cruz, mientras Al-Attiyah/Baumel no sólo perdían el triunfo en la carrera, ya que también se quedaban sin la Copa del Mundo de Bajas, que pasaba a manos de Vasilyev/Tsyro.