Los dos vehículos todoterreno de Toyota, el Land Cruiser y el Hilux, serán compatibles con el combustible renovable HVO100, un tipo de diésel que no contiene combustibles fósiles y procede de fuentes 100 % renovables. El diésel HVO100 se podrá utilizar en las unidades de Hilux y Land Cruiser fabricadas a partir del primer trimestre de 2023, sumándose a la familia Toyota Proace, ya compatible con el diésel HVO100.
El HVO100 (Hydrotreated Vegetable Oil, o aceite vegetal hidrotratado), cumple la norma de calidad europea EN 15940 de gasóleo parafínico. Tiene un cetanaje superior (c80) que el gasóleo estándar, así como un contenido inferior de azufre e hidrocarburos aromáticos. Está hecho de aceite vegetal (de palma, colza) y residuos reciclados, como, por ejemplo, aceite de cocina usado.
Los surtidores de HVO100 son cada vez más habituales en las estaciones de servicio europeas, y hay ya alrededor de un millar en funcionamiento entre Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Holanda, Noruega y Suecia. Al mismo tiempo, a medida que más clientes se pasan al HVO100, aumenta la producción, con la expectativa de alcanzar los 15,5 millones de toneladas anuales en 2030, respecto a los cerca de cuatro millones de toneladas que se producen en la actualidad.
El uso de HVO100 no requiere ninguna acción especial ni cambio del estilo de conducción por parte del cliente. La principal modificación técnica respecto a los vehículos actuales consiste en un ajuste del sistema de inyección de combustible, para aumentar el caudal de este, porque el HVO100 es menos denso que el gasóleo estándar. Este cambio no afecta a la capacidad del vehículo de funcionar con gasóleo “normal”, así que se puede usar cualquiera de los dos combustibles de forma habitual. A raíz del uso de HVO100 y el ajuste del sistema de inyección, se produce un ligero incremento de la potencia máxima desarrollada por el motor. Los Toyota Land Cruiser y Toyota Hilux con esta nueva especificación se fabricarán a partir del primer trimestre de 2023.