Por: @_Nacho Salvador

Pamplona y sus alrededores ha sido el lugar elegido por Land Rover para la presentación de la quinta generación de su buque insignia, el Range Rover. Un coche que cumple ya más de 50 años, su lanzamiento fue en 1970, y que ha mantenido la esencia original de ser un TT de lujo. Cada vez más de lujo, ya que alcanza unos estándares espectaculares, tanto en este sentido como en la tecnología empleada.

La verdad es que debo de reconocer que el coche me ha gustado mucho. Es impresionante en todos los sentidos. Aunque también lo es que, a mí, personalmente, me gustaba más el coche cuando era más un TT de lujo que un vehículo de lujo con buenas cualidades TT. Porque no pongo en duda que las cualidades offroad del coche son sensacionales, como buen Land Rover, que lo son, pero ahora casi da pena ensuciarlo metiéndolo en el campo, o arriesgarse a un pinchazo con sus llantas de 22” o de 23”. Pero también es verdad que han pasado más de 50 años y ya casi nadie usa los TT para meterlos en el campo.

La estética es uno de los puntos fuertes de este nuevo Range Rover.

Dicho esto, reflexión de un cincuentón que añora coches TT menos tecnológicos, que ya no existen, vamos a meternos en harina. Y lo primero que hay que decir es que el nuevo Range Rover impresiona por todo, comenzando por su estética, uno de los puntos fuertes de la marca durante los últimos años.

Hay dos tamaños de carrocería: batalla corta (SWB) con 5,05 m de longitud y batalla larga (LWB) con 5,25 m.

El Range Rover 2022 es un coche completamente nuevo, con una longitud de 5,05 metros (5,25 m en la versión de batalla larga), que se ofrece en tres configuraciones (4, 5 y 7 plazas), cinco acabados (SE, HSE, Autobiography, First Edition y SV) y 5 motores: dos diésel con microhibridación, un gasolina V8 y dos gasolina híbridos enchufables, a los que se unirá en 2023 una versión 100% eléctrica. En todas las versiones y motorizaciones, la tracción es total permanente, la caja de cambios una ZF de ocho relaciones y la suspensión neumática.

Todos los Range Rover montan una caja automática ZF de variador y ocho relaciones.

Durante la presentación tuvimos la ocasión de probar dos de estas mecánicas: El V8 y el diesel de 350 CV. El V8 monta un impresionante motor de gasolina de 4,4 litros, que alcanza una potencia de 530 CV y un par de 750 Nm. Una gozada para los amantes de los motores de combustión, que se enamorarán del sonido de su propulsor. Las prestaciones son espectaculares, ya que acelera de 0 a 100 km/h en sólo 4,7 segundos y alcanza los 250 km/h.

La suspensión neumática es común en toda la gama.

En cuanto al diesel, se trata de un motor de seis cilindros en línea de tres litros, turboalimentado y con una potencia máxima de 351 CV, además de un par de 700 Nm. Cuenta con la ayuda de una microhibridación de 48 v, gracias a lo que dispone de la etiqueta ECO de la DGT. Tarda 6,1 segundos en llegar hasta los 100 km/h partiendo desde parado y anuncia una máxima de 234 km/h.

En la tercera fila de asientos pueden viajar adultos de buena altura.

Muy destacable, como no podía ser de otra manera, el interior del Range, en el que encontramos lujo donde miremos, además de un buen número de detalles. E incluso encontramos el uso de material poco habituales, como es la cerámica, presente en algunos acabados. El espacio es muy grande y hay que destacar que en los asientos de la tercera fila cabe un adulto, algo que pude comprobar personalmente. No es el ideal para viajes muy largos, pero es verdad que caber se cabe, con mis 1,80 de altura. Además, el acceso a esa fila es bastante sencillo y no hay que ser un contorsionista.

Cuadro de mandos digital de 13,7″, configurable desde el volante.

Una vez al volante, el asiento es tremendamente cómodo y sujeta bastante bien. Delante nos encontramos un cuadro que se visualiza mediante una pantalla de 13,7”, configurable desde el volante. Por su parte, en el centro del habitáculo encontramos la pantalla multifunción, de 13”, colocada a modo de Tablet flotante. Su sistema multimedia es compatible con Android Auto o Apple Car Play y, además, dispone del asistente Alexa de Amazon.

El sistema multimedia dispone de Alexa, el asistente de Amazon.

La prueba del coche se realizó en una gran parte por reviradas carreteras de montaña, donde el coche mostró un comportamiento espectacular. No había recorrido de campo, con lo que nos quedamos con las ganas de probar sus cualidades camperas, sabiendo que estando equipado con el eficaz sistema Terrain Response 2 tienen que ser buenas. Aunque también es verdad que el bajísimo perfil de las llantas de 23” que montaba nuestro coche invitaban poco a salidas camperas. Entre otras cosas, porque no hay rueda de repuesto.

El Range Rover es muy ágil en todo tipo de carreteras. La dirección en las ruedas traseras ayuda mucho.

Centrándonos en lo que sí se pudo hacer, destacar el excelente comportamiento del coche en las reviradas carreteras de la presentación. Es un coche grande, muy grande, y pesado (más de 2.600 kg), pero gracias a todas las ayudas a la conducción que monta, o a la dirección en las ruedas traseras, es súper eficiente en zonas de montaña. Tanto que casi se te olvida que llevas un coche de más de cinco metros de largo.

La tracción total es de serie en todos los Range Rover.

En primer lugar, tuvimos la ocasión de ponernos a los mandos del Range equipado con el motor V8. Una mecánica espectacular, con una respuesta inmediata al acelerador y que subía las empinadas carreteras navarras como si nada. Eso sí, acompañado por el ronco sonido de los motores V8, una delicia para cualquier aficionado a los motores de gasolina.

De cara a sus salidas al campo, el Range Rover monta el sistema Terrain Response 2.

En cuanto al diesel, éste tampoco decepciona y mueve el coche con muchísima soltura. Tanto que parece mucho más ligero de lo que realmente es. Impresiona también la excelente recuperación de la mecánica de gasóleo, que ofrece, además, un funcionamiento suave y muy silencioso. Resumiendo, ninguna de las dos versiones que pudimos probar, decepcionarán por sus prestaciones y cualidades a quien las conduzca. Todo lo contrario.

Las llantas pueden ser de hasta 23″.

Y, para terminar, la parte “dolorosa” del asunto, que es que el Range Rover no es un coche para todos los bolsillos. El lujo y la tecnología se pagan, con lo que la gama Range Rover, de la que tienes todos los precios en la tabla adjunta, arranca en 140.950 euros del híbrido enchufable con motor de 441 CV, hasta los 263.150 euros del exclusivo V8 con chasis largo y acabado SV.

Precios gama Range Rover 2022

Range Rover SWB P440e PHEV SE 140.950 euros
Range Rover SWB D300 MHEV SE149.000 euros
Range Rover SWB P440e PHEV HSE149.150 euros
Range Rover LWB P440e PHEV HSE153.350 euros
Range Rover SWB P510e PHEV HSE157.900 euros
Range Rover SWB D300 MHEV HSE158.200 euros
Range Rover SWB P440e PHEV Autobiography 165.850 euros
Range Rover SWB D350 MHEV HSE 166.450 euros
Range Rover LWB P440e PHEV Autobiography168.900 euros
Range Rover LWB D350 MHEV HSE170.650 euros
Range Rover SWB P440e PHEV First Edition173.150 euros
Range Rover LWB D350 MHEV HSE 7 plazas173.850 euros
Range Rover SWB P510e PHEV Autobiography174.400 euros
Range Rover LWB P440e PHEV First Edition 177.350 euros
Range Rover SWB D300 MHEV Autobiography177.500 euros
Range Rover SWB P510e PHEV First Edition178.150 euros
Range Rover SWB D350 MHEV Autobiography185.600 euros
Range Rover LWB D350 MHEV Autobiography 7 plazas188.350 euros
Range Rover LWB D350 MHEV Autobiography 189.000 euros
Range Rover SWB D350 MHEV First Edition 195.650 euros
Range Rover LWB D350 MHEV First Edition199.050 euros
Range Rover SWB P510e PHEV SV 209.150 euros
Range Rover SWB D350 MHEV SV 221.100 euros
Range Rover SWB P530 SV236.600 euros
Range Rover LWB D350 MHEV SV 248.700 euros
Range Rover LWB P530 SV263.150 euros