Por Xavi Blanco
Ya hemos finalizado la sexta etapa. Teníamos dos Controles de Paso, uno en el km 44, otro en el km 88 y luego un punto de repostaje en el km 144, el único que había hoy. Hasta allí era todo súper rápido y con mucha navegación, mucho cambio de rumbo. Una parte de los caminos se veían bien y otros no, pero lo hemos ido pasando bien, sin problemas.
Luego seguíamos pista rápida entre ríos secos, hasta que en los últimos 40-50 kilómetros entrábamos en pista arenosa, en zona de dunas. Había una pista súper rápida, arenosa, que iba subiendo dunas. Bestial. Podías ir a 120 km/h haciendo las subidas y bajadas de las dunas, que eran muy suaves.
Cuando nos quedaban 10 kilómetros para la meta hemos saltado en una duna dura, pero la otra parte de la duna estaba muy blanda. Se han clavado las ruedas y hemos dado una vuelta, pero el coche ha caído sobre las cuatro ruedas, así que Camelia ha metido marcha y hemos tirado para adelante.
Sí que hemos tenido que parar después, porque habíamos roto el cristal y no veíamos. Hemos parado un momento y con un par de patadas ha salido el cristal disparado y hemos acabado la etapa sin él. Contentos, porque hemos terminado en el puesto 14 de la etapa y nos mantenemos en el top ten de la clasificación general.
Los mecánicos han empezado a desmontar ya todo el Yamaha. Lo harán prácticamente todo nuevo: caja de cambios, diferenciales, palieres, amortiguadores, todo… Menos el motor, todo lo demás será nuevo. Una buena revisión y pasado mañana a darle más gas, que para eso estamos.