Por: Astara Team

Carlos Checa se despide de las dunas como el mejor español en su categoría

Los pilotos afrontan la penúltima etapa del Dakar con la vista puesta en los 673 kilómetros que tienen por delante, de los cuales 153 corresponden a la especial en la que de nuevo predominan las dunas, de arena muy blanda, pero algo menos complicadas que los días anteriores. Etapa corta, pero con muchísimas dunas y un enlace final larguísimo.

El primer coche del Astara Team en pasar por meta ha sido el de Laia Sanz y Maurizio Gerini y lo ha hecho en la posición 39, a 27 minutos y 9 segundos del líder de la etapa y en un tiempo total de dos horas, 53 minutos y 26 segundos. A pesar de que la etapa no era complicada, Laia Sanz lo ha pasado mal porque ha tenido que hacer frente al subir y bajar continuo de las dunas con un gran mareo y el estómago revuelto. “Se me ha hecho largo llegar a la meta. No era una especial difícil hoy, pero no ha sido nada agradable”.

El Astara 01 propulsado por e-fuel de Carlos Checa y Marc Solà pasaba por meta en el puesto 44 tras realizar un trayecto ‘limpio’, sin dificultades, y a 28 minutos y 19 segundos del ganador. “Houston, Houston, hoy sin problemas, hemos llegado bien. Cortamos comunicación”. Así de contentos y bromeando contactaban con el equipo tras terminar la especial en la que han terminado como primer equipo español en la categoría T1.

Carlos Checa: ““Ha sido una etapa hoy sin ningún percance. Totalmente dunas, pero hoy bien, hemos controlado bien las presiones y las trazadas. Al final con el sol de espalda costaba ver el relieve y nos hemos mareado un pelín, pero ha sido una etapa divertida y bonita. Había zonas en las que no se podía correr mucho, que es lo que me gusta más, coger velocidad, y algunas zonas en las que se podía correr más tampoco teníamos la visión para saber si la duna estaba cortada o no. En resumen, ha sido una etapa todo de dunas, con zonas de arena mucho más blandas que había que bordear. Ha sido una formación perfecta para aprender a navegar por dunas. También el hecho de salir muy atrás, la pista estaba más destrozada y nos ha perjudicado un poco, pero era el hándicap que teníamos en esta etapa”.

“Me llevo un aprendizaje de este Dakar en todos los aspectos.  A nivel deportivo, a nivel emocional, porque es una carrera en la que tienes que aprender a saber ir despacio, a contenerte, a saber dosificar mucho la velocidad, a conservar la mecánica, a aprender de mecánica… Hay muchos aspectos importantes y cada detalle influye. No puedes abarcarlo todo, pero sí puedes aprender cosas. Después está la parte humana, que somos un grupo de personas que estamos juntos durante 20 días, muchos sin dormir, en muchas situaciones tensas, conviviendo mucho tiempo, sobre todo con mi copiloto. Y seguramente me voy de aquí con un grupo de amigos, con los que he vividos momentos muy intensos. A nivel de formación, creo que Infova ha ayudado mucho para saber gestionar las relaciones personales, las tensiones, las emociones… Hay mucha gente aquí, hay momentos de desesperación… Pero la peor derrota es el abandono. Y en ese aspecto, nos hemos ido sobreponiendo y la parte humana y de formación que ha venido preparada de antemano ha sido fundamental para hacer frente a todos esos momentos difíciles que hemos tenido”.

Marc Solà: Muy contentos. Una etapa limpia, con conducción y navegación perfectas. Estamos a un día del final. No podemos cantar victoria, mañana es como si fuera la primera etapa y tendremos que estar concentrados al cien por cien. A luchar hasta el final”.

Laia Sanz: “Me he mareado mucho. Debo tener algún virus estomacal, y hoy en las dunas lo he pasado mal, porque no hacíamos más que subir y bajar, y no se veía el relieve, lo que suele provocar que te marees. Es la primera vez que me sucede algo así, y lo he pasado mal, pero no había más remedio que seguir adelante. He tenido que parar a vomitar. Se me ha hecho largo llegar a la meta. No era una especial difícil hoy, pero no ha sido nada agradable. En los años malos es cuando más se aprende y yo en este Dakar estoy haciendo un máster que me servirá muchísimo para el año que viene”.

En esta edición la lluvia no da mucha tregua en Arabia, un país en el que el agua suele brillar por su ausencia. Los participantes del que está siendo el Dakar más duro de los últimos años despiden su última noche de campamento con agua, barro y frío. Con esta penúltima etapa, los pilotos dicen adiós a las dunas de Arabia Saudí. Mañana tendrán mucha arena y tierra. El Dakar 2023 dirá adiós en Dammam.