Por: Repsol Rally Team

Isidre Esteve supera la primera parte de la maratón pese a un contratiempo

Los pilotos del Repsol Toyota Rally Team han completado una difícil 11ª etapa del Rally Dakar con un retraso de algo más de tres horas después de engancharse dos veces en las dunas y tener un problema técnico.

El copiloto, Txema Villalobos, ha tenido ración extra de trabajo en la arena, pero su pericia ha permitido al equipo retomar la marcha y llegar al vivac, donde esta noche no está permitida la asistencia de los mecánicos.

“Aunque no ha sido un buen día, lo positivo es que estamos en el campamento, cuando perfectamente podríamos estar durmiendo en las dunas”, comenta Esteve.

Isidre Esteve y Txema Villalobos han finalizado la primera mitad de la etapa maratón del Rally Dakar, trazada en el temido Empty Quarter, tras superar una situación límite en las dunas saudíes. Un contratiempo técnico que impedía volver a poner en marcha el motor del coche del Repsol Toyota Rally Team, unido a dos enganchones en las dunas, han puesto a prueba la pericia y las dotes mecánicas del conjunto español, que tras más de tres horas de reparaciones en plena especial ha conseguido alcanzar la meta del campamento para seguir mañana en carrera.

El primer segmento de etapa maratón vaticinaba grandes dificultades, tanto en la navegación como por la propia naturaleza del recorrido, que alternaba zonas rápidas con tramos de arena y dunas. Isidre Esteve y Txema Villalobos sorteaban la primera mitad de la especial rodando a muy buen ritmo y recuperando terreno respecto a la jornada de ayer, que cedió un gran protagonismo a los buggies ligeros (T3 y T4). Sin embargo, en el kilómetro 180 ha llegado el primer desafío, como relata el piloto ilerdense: “Hemos saltado una duna sin mayor problema, pero al aterrizar he calado el coche. Cuando lo he intentado volver a poner en marcha, el motor de arranque no funcionaba. Por suerte estábamos en bajada, así que, cuando Txema ha quitado arena de las ruedas, ha bastado un empujón para hacer revivir la mecánica y seguir adelante”. Primera dificultad salvada, pero a cambio de un hándicap notable: la tripulación española no podía volver a calar el Toyota, y todavía les quedaba un largo tramo de arena por salvar…

“La última duna del día tenía una doble cresta en su cima, y al saltar la primera me he quedado clavado en la segunda con el coche colgando. En este punto, Txema se ha puesto de inmediato a trabajar para desmontar todo hasta dar con el problema y volver a poner en marcha el coche, operación que le ha costado más de tres horas. Pero tras repararlo, hemos podido llegar a meta. Aunque no ha sido un buen día, lo positivo es que estamos en el campamento, porque podríamos estar perfectamente durmiendo en las dunas”, concluye Isidre Esteve.

El tiempo perdido ha relegado al Repsol Toyota Rally Team a la 112ª posición de la jornada, 44ª entre los T1, a 3h y 26 minutos del vencedor de la etapa. Se rompe con ello la extraordinaria progresión en la clasificación general de los últimos días, y los pilotos apoyados por Repsol, MGS Seguros, KH-7 y Toyota España retroceden a la 36ª plaza de la general de coches, aunque se mantienen en 25º puesto entre los T1.

Al tratarse de una etapa maratón, Esteve y Villalobos no contarán esta noche con el apoyo de los mecánicos del Repsol Toyota Rally Team, por lo que deberán reparar el Toyota Hilux T1+ con sus propios medios. El reencuentro con todo el equipo técnico se producirá al fin de la etapa de mañana, que concluirá en Shaybah tras 185 km cronometrados.